lunes, 3 de febrero de 2014

TEMA III
Desarrollo socioemocional y de la personalidad en la Infancia Intermedia

3.1 El concepto de si mismo

El concepto de si mismo es uno de los elementos centrales en la constitución de la personalidad de los individuos se refiere al conjunto de percepciones, ideas o teorías que poseemos de nosotros mismos.
Autoconcepto es autoconocimiento, y engloba aspectos como autopercepción, memoria autobiográfica, juicios descriptivos y juicios valuativos que la persona hace de sí misma y que surgen de la comparación con los demás y conforman la autoestima.
El concepto de sì mismo es el núcleo central de la personalidad que afecta cada aspecto del comportamiento de la persona y su aprendizaje. El concepto de sì mismo lo definiremos como la idea que el niño se va formando acerca desì a través de la información que recibe del medio y a través de sus propias experiencias con este. Esto incluye cómo él seve, lo que èl siente y piensa que es, y en gran parte corresponde a como èl cree que los demás lo ven. El concepto de sì mismo esta formado por todas las creencias y actitudes que tiene la persona respecto a sì mismo; abarca un conjunto bastante amplio de representaciones mentales, que incluyen imágenes y juicios, no solo conceptos, que el individuo tiene acerca de sì mismo y que engloban sus distintos aspectos corporales, psicológicos, sociales y morales. El determina lo que la persona es, lo que piensa, lo que hace y lo que puede llegar a ser. Este concepto va acompañado de sentimientos de éxito o fracaso, aceptación o rechazo, alegría o tristeza, triunfo o derrota. Estos sentimientos son los que van a definir la autoestima, que corresponde a juicios evaluativos de autoevaluación que la persona hace de sì misma y en la que también tienen gran relevancia las valoraciones que los adultos hacen de ella. Esto constituye la autoestima, a menudo confundida con el autoconcepto y, en realidad, una parte de èl.




3.1.1 Desarrollo del  autoconcepto
Se distinguen 3 etapas en el desarrollo del autoconcepto:


 ETAPA DEL SÍ MISMO PRIMITIVO:
Abarca desde el nacimiento hasta los 2 años.
Desde el momento que nace, el niño se relaciona interactivamente con sus padres, especialmente con su madre.
A partir de esas relaciones va desarrollándose el proceso de percibirse a sí mismo como una realidad diferente de los demás, haciéndose cada día un poco más autoconsciente.
Alrededor de los doce meses llega al reconocimiento visual de sí mismo, frente a un espejo.
Alrededor de los 18 meses comienza a referirse a sí mismo, pero en tercera persona.
 ETAPA DEL SÍ MISMO EXTERIOR:
Desde los 2 años hasta los 12, aproximadamente.
A esta edad ya puede dar información de sí mismo. Poco a poco va agregando elementos y precisión a su visión de sí mismo. Comienza a evaluarse en un sentido positivo y negativo.
Esta etapa es crucial desde el punto de vista de la imagen personal, porque es la más abierta a la entrada de información. Las experiencias de éxito y fracaso y las interacciones con los adultos son decisivas. Por eso es muy importante que los educadores sean lo más positivos posibles al dar al niño retroalimentación acerca de sí mismo.
Al principio de esta etapa, el niño se define a sí mismo y se diferencia de los otros por sus rasgos físicos. Entre los 8 y 9 años comienza la definición personal, basándose en algunos rasgos psicológicos. A esta edad se hacen evidentes los sentimientos de estar avergonzado u orgulloso de sí mismo. El sentimiento de sí mismo que se adquiere en esta etapa resulta difícil de modificar posteriormente.
Al final de la etapa hay un aumento de la autoconciencia: presentan un mayor reconocimiento de sí mismos y una mayor conciencia de cómo son percibidos por los otros.
  

No hay comentarios:

Publicar un comentario